Revista LifePlay Nº 2 – Febrero 2014 – ISSN: 23405570
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1. Introducción
Seguramente sería demasiado aventurado y pretencioso afirmar
que nuestros días están arrojando a los imaginarios colectivos más
héroes ficcionales que nunca. No obstante, resulta evidente que
vivimos en un momento en el que los medios de gran distribución
no cesan en su (re)creación de personajes excepcionales que llegan
a tener el peso de su destino en sus manos. Dentro del magma de
las ficciones contemporáneas, es de destacar el papel fundamental
que representan los videojuegos, en lo que a adaptaciones y
construcciones de mitos heroicos se refiere. Es más, se podría
afirmar que el mito heroico ha supuesto uno de los pilares
narrativos de los videojuegos desde sus orígenes. Sin embargo, si se
vuelve la mirada fuera del marco retórico de la épica ficcional, se
observará una realidad cotidiana que se opone frontalmente a todo
mundo de acción, reacción y cambio. Es precisamente en el eje de
dicha oposición entre el mito videolúdico y el contexto en el que se
genera donde pretende situarse el presente estudio, para intentar
arrojar algunas luces sobre la naturaleza de dicha estructura mítica,
de las motivaciones externas que la propician, así como de las
consecuencias que su expansión produce en el propio medio que la
presenta y en los jugadores que la transitan.
Partiendo de esta idea, el siguiente trabajo se plantea como la
propuesta de unas bases que puedan propiciar el estudio
comunicativo y cultural del videojuego, el cual, originándose en sus
propias estructuras significantes y de sentido internas, pueda dar
cuenta de las implicaciones económicas, ideológicas y culturales
que propician la aparición de dichas estructuras y no de otras. De
este modo, no solo no se abandona la noción de estructura en la
que se han basado la mayor parte de descripciones semióticas de
los videojuegos, sino que, al entender el medio y sus productos
dentro de la comunicación de masas, se pretende ampliar la
concepción de dicha estructura mítica en relación con las entidades
suprasígnicas o extrasígnicas que la sustentan.
Para alcanzar dicho objetivo, el primer paso será definir cuáles
son las estructuras formales y semánticas prototípicas que los
videojuegos de gran distribución han desarrollado, fijándolas como
código de su lenguaje. Entre ellas, como se verá, se perfilarán con
gran nitidez una estructura y una figura míticas. Ambas serán
analizadas, en términos comunicativos, desde el punto de vista de
su recepción y el de su producción en el contexto del capitalismo
tardío occidental con el objetivo de intentar poner en evidencia las
motivaciones de su éxito y de su expansión genérica dentro del
medio videolúdico.